A principios de la década de los cincuenta, Antonio Suadi comenzó vendiendo latas de gasolina de hacienda en hacienda en el occidente del país. En 1952, adquirió la primera bomba de gasolina de Sonsonate y se instaló como gasolinera. Con este primer gran paso, vio la oportunidad de ampliar su negocio e introdujo la venta de fajas, baterías, embragues y aceites de carro al detalle. Como resultado de su emprendedurismo, para el año 1956, la gasolinera se había convertido también en una venta de repuestos formal y pasó a llamarse Antonio y Jacobo Suadi. A principios de la década de los sesenta, inauguró el Almacén Antonio y Jacobo Suadi.
En 1965, los hermanos Suadi comenzaron a vender automóviles Daihatsu, motos Suzuki, electrodomésticos General Electric, otros productos para el hogar y repuestos para vehículos. No solo habían hecho crecer el almacén, sino también la gasolinera la cual contaba con bombas más modernas. Asimismo, los hermanos Suadi contaban con la distribución exclusiva del gas propano de la marca TROPIGAS a nivel regional.
Doce años más tarde, los hermanos Antonio y Jacobo decidieron separarse, partiendo el negocio en dos partes iguales. En ese momento, Antonio M. Suadi hizo un reenfoque del almacén y, en 1978, el cual tomó el nombre de su dueño y especializándose únicamente en la distribución de repuestos automotrices. En 1980, y a raíz de este gran cambio, nació la nueva sociedad SUADI, S.A. de C.V. y al almacén adoptó el nombre comercial SUADISA.
En 1985, Antonio M. Suadi, pionero de la empresa, falleció, dejando a su hijo, Enrique Suadi, con las riendas del negocio. A finales de la década de los ochenta, Enrique Suadi adquirió el primer servidor para montar la aplicación de facturación e inventario, mecanizando el sistema de facturación.
A partir de 1997, y con una amplia visión, Enrique Suadi, fundó la empresa SO, S.A. de C.V. como la distribuidora mayorista a nivel nacional del ahora Grupo SUADISA.